Este articulo lo escribí para Mundo Obrero, siendo publicado en la contraportada de su edición de este mes de Febrero. En él explico, de manera resumida, las políticas llevadas a cabo por IU en Conil para construir un modelo de ciudad para el futuro contando con la gente.
CONIL,
UN DISEÑO DE FUTURO CONTANDO CON LA GENTE
Conil,
municipio del litoral gaditano, es gobernado por IU desde 1995 hasta la fecha
actual. Durante seis legislaturas la
izquierda ha ganado las elecciones. Una de las claves de estas sucesivas
victorias electorales, hay que residenciarlas en la conexión entre nuestra
organización y la sociedad civil, trasladada de inmediato a la relación entre
institución municipal y ciudadanía. Si en el año 1995 conseguimos el «sorpaso»,
ser la fuerza hegemónica de la izquierda en Conil, más tarde, lo importante, es
haber recreado esta hegemonía hasta estos momentos.
Nuestro
modelo es diferente a otros lugares del entorno y del litoral andaluz. Proteger
amplias zonas del litoral, desclasificar suelo, planificar democráticamente,
defender lo público, modernizar y crear mecanismos importantes de bienestar y
cohesión social, poner en funcionamiento una potente empresa pública, para
crear empleo, viviendas, urbanizar suelo y construir instalaciones para las actividades
productivas de pequeños emprendedores, construir infraestructuras y
equipamientos, etc. Superando déficits históricos e impulsando el desarrollo
local endógeno, rebasando en muchos parámetros económicos, medioambientales y
sociales a muchas localidades del entorno y fuera de él. Y
todos ello, lo hemos realizado a contracorriente, como los salmones que surcan
las difíciles corrientes para llegar a su objetivo, pero hemos contado con los
ciudadanos, con la sociedad civil. Los cambios se producen por
procesos interconectados, no por ocurrencias más o menos brillantes, por hechos
aislados, por simple azar o decisión divina. Desclasificar tres millones de
metros cuadrados de suelo urbanizable del litoral a suelo Protegido y renunciar voluntariamente a la construcción
en el frente litoral en la época de desarrollismo salvaje (aceptado por la
mayoría de la población) no deja de ser un hecho aislado, sino se explica dentro
del proceso de toma de esta decisión, en su origen, dentro de un modelo de
desarrollo, convenciendo a las personas ciudadanas de que era bueno para el
futuro, de las condiciones objetivas y subjetivas en la que se entroncan las
decisiones, del ADN de la Izquierda que articula el proceso de cambio, y sabe
la importancia, de en qué momento del proceso de transformación se está en cada
momento.
Esto
ha sido posible, por gobernar de manera diferente, planificando de manera
democrática y participada. Pensando el futuro, planificando con vistas al
horizonte, y además hacerlo con la gente, como decía León Felipe: “Voy con las
riendas tensas, y refrenando el vuelo, porque no es lo que importa llegar solo
ni pronto sino llegar con todos y a tiempo”. Hay que destacar la continuidad
del proceso planificador a lo largo del tiempo mediante diferentes figuras e instrumentos
(Planes Estratégicos, PGOU, Presupuestos, etc...) con la misma línea política y
con una marcada coherencia interna en las líneas de actuación aprobadas y
desarrolladas.
Hemos
defendido siempre que la planificación tenía que ser duradera e integrada y,
por supuesto, participada; recogiendo aspectos esenciales de planificación
estratégica, urbanística, ambiental y turística. Como rasgo fundamental de este
proceso de planificación era «lograr el apoyo social a medidas muy infrecuentes
en el contexto del litoral español de las últimas décadas». Tales como
desclasificación de suelo urbanizable en el borde costero, o elevación del
nivel de protección del patrimonio natural, por iniciativa municipal.
La
valentía política de desclasificar y proteger amplias zonas del litoral conileño
en pleno auge de la burbuja inmobiliaria, con el apoyo social, ha sido clave en
la búsqueda de otro modelo de desarrollo. Mantenerlo será tarea de todos los
que pensamos que el mundo no lo heredamos de nuestros padres, sino que se lo
pedimos prestado a nuestros hijos.
La hegemonía no consiste en ganar las
elecciones durante 6 legislaturas, sino «convencer» a los ciudadanos y
ciudadanas que era posible otra política diferente a la que se venía haciendo
anteriormente. Y que la organización de IU en Conil era capaz de interpretar la
realidad local en su contexto, y elaborar colectivamente propuestas y
alternativas que beneficiaban a la mayoría de la población .Como fuerza
determinante, que conduce, que interpreta en un momento dado las
contradicciones sociales y hace propuestas para superarlas y estas son
aceptadas por la mayoría de la población, refrendándolas durante 6 legislaturas
seguidas. No se trata instrumentalizar a nuestra base social para mantenernos
en el poder, sino concienciar democráticamente a los ciudadanos para que
cambien la realidad establecida hacia otra con más calidad de vida para la
mayoría de los trabajadores-ciudadanos. Es la hegemonía en el sentido
gramsciano, concebida como la construcción de una alternativa intelectual y
moral, que se elabora colectivamente.
Por
último decir, que Conil, desde 1995 es “un municipio del Cambio”, de igual
manera que muchos ayuntamientos gobernados por IU y durante años han resistido
creando alternativas concretas frente a las políticas neoliberales y
antimunicipalistas del PSOE y del PP.
En
Conil hemos ganado la hegemonía con un instrumento, IU, sin esconder nunca que
somos de izquierda. El problema para “ganar “en otros lugares, desde mi punto
de vista, no es del instrumento, sino de
las políticas, sino entender que la lucha por la hegemonía, como pensaba
Gramsci, se tiene que librar «antes» de la transición del poder, así como,
durante y después de acceder a él. La decisión de la Asamblea de IU de Conil de
seguir el camino lento, de trabajo, de concienciación hacia la sociedad civil y
los ciudadanos fue la correcta. Con el tiempo se ha demostrado, como diría
Julio Anguita: «La política es el arte agrario. Hay que sembrar, cultivar,
regar, cuidar, recoger. Vivimos con la memoria, cambiando y cuidando las cosas»
Antonio Roldán Muñoz. Ex Alcalde
de Conil y autor del libro “Conil el
esfuerzo colectivo”
https://drive.google.com/file/d/0B4Mr7n4GD5GPaWptdkQ3UDVJZ00/view?usp=sharing
https://drive.google.com/file/d/0B4Mr7n4GD5GPaWptdkQ3UDVJZ00/view?usp=sharing
Artículo sobre Conil, mi pueblo de adopción, escrito por Antonio Roldán, su anterior alcalde, con el que estoy de acuerdo en el enfoque que IU dió a este municipio gaditano.
ResponderEliminarGracias porque lo habéis hecho así.
Gracias por haber planificado a largo plazo y no a corto, como suelen hacer casi todos los políticos, que sólo se fijan en el plazo de su legislatura.
Gracias porque habéis pensado en las futuras generaciones y no sólo en el interés presente de unos pocos,
Gracias por no haber pensado sólo en lucrarse, de forma más o menos legal, como se ha hecho en la mayoría de los municipios costeros españoles, destrozando sus bellos paisajes y medio ambiente.
Gracias por la armonía urbanística que el municipio tiene, a la que considero ejemplo a seguir para muchos municipios.
Gracias por no haber permitido la construcción de altísimos bloques de apartamentos, iguales en todas las partes del mundo, destruyendo la idiosincrasia de cada pueblo.
Gracias por haber respetado sus bellas playas y no haberlas destrozado con construcciones masivas.
Por todo lo anterior, de nuevo, gracias.
Y, para terminar, un deseo. Deseo que ningún interés económico, político, o de otra índole, destruya lo que en todo este tiempo, en estas 6 legislaturas, se ha respetado y creado. Marisa Reyna Amor
Artículo sobre Conil, mi pueblo de adopción, escrito por Antonio Roldán, su anterior alcalde, con el que estoy de acuerdo en el enfoque que IU dió a este municipio gaditano.
ResponderEliminarGracias porque lo habéis hecho así.
Gracias por haber planificado a largo plazo y no a corto, como suelen hacer casi todos los políticos, que sólo se fijan en el plazo de su legislatura.
Gracias porque habéis pensado en las futuras generaciones y no sólo en el interés presente de unos pocos,
Gracias por no haber pensado sólo en lucrarse, de forma más o menos legal, como se ha hecho en la mayoría de los municipios costeros españoles, destrozando sus bellos paisajes y medio ambiente.
Gracias por la armonía urbanística que el municipio tiene, a la que considero ejemplo a seguir para muchos municipios.
Gracias por no haber permitido la construcción de altísimos bloques de apartamentos, iguales en todas las partes del mundo, destruyendo la idiosincrasia de cada pueblo.
Gracias por haber respetado sus bellas playas y no haberlas destrozado con construcciones masivas.
Por todo lo anterior, de nuevo, gracias.
Y, para terminar, un deseo. Deseo que ningún interés económico, político, o de otra índole, destruya lo que en todo este tiempo, en estas 6 legislaturas, se ha respetado y creado.